Por segunda vez, la Municipalidad de San Isidro produce íntegramente una obra de teatro: “Un día muy particular”, inspirada en la famosa película italiana “Una giornata particolare” del director Ettore Scola (1977). La obra es dirigida por Carlos Tolentino y cuenta con las actuaciones de Attilia Boschetti, Sergio Paris y Cecilia Tosso. El estreno es el viernes 5 de mayo en el Teatro de Cámara del Centro Cultural El Olivar (Calle La República 455). La temporada va hasta el 25 de junio de jueves a domingo a las 8 pm. Entrada general 40 soles, estudiantes y jubilados 25, de venta en Teleticket y la boletería del teatro una hora antes de la función.
La historia de “Un día muy particular” gira en torno a un extraño encuentro personal entre dos personajes el día que Hitler visita Roma, el 6 de mayo de 1938. Es un día de fiesta para la Italia fascista que se vuelca en el recibimiento. En una casa de vecinos sólo quedan la portera, un ama de casa, Antonietta, y Gabriele, un hombre solo que teme a la policía por algún motivo desconocido. Al margen de la celebración política, Antonietta y Gabriele establecen una relación afectiva muy especial que les permite evadirse durante unas horas de la tristeza y la monotonía de la vida cotidiana.
“Esta es una historia que conecta con el público, pues a pesar de ambientarse en 1938, el argumento es muy actual pues sigue habiendo muchas mujeres insatisfechas con sus respectivas familias que pueden sentirse atraídas por hombres que son homosexuales debido a la sensibilidad que estos tienen en comparación con sus maridos. Para el espectador resulta muy triste el papel de Gabriele pues produce mucha impotencia saber que se ha quedado sin trabajo y que lo van a detener por sus ideas políticas y su condición sexual, al igual que el papel de Antonieta, que ve como se le pasa la juventud encerrada en una casa de la que no puede salir”, explica el director de la obra Carlos Tolentino.
En la puesta en escena de Tolentino, la relación entre los personajes se da a puertas cerradas, donde estos espacios son oscuros, grises, y las viviendas de Antonietta y de Gabriele tienen un carácter lúgubre y una decoración realista y austera que simboliza la prisión en la que viven los personajes.