Iniciativa fue acogida por el alcalde de San Isidro, contribuyendo en la lucha contra el Coronavirus con medidas que no dañan el medio ambiente.
La Municipalidad de San Isidro incursiona en una nueva metodología para prevenir el contagio del coronavirus, empleando una máquina que aplica vapor de agua a temperaturas que alcanzan entre los 100 y 120 °C, provocando la desnaturalización de proteínas esenciales para la supervivencia de los microorganismos.
Este sistema fue presentado por un grupo de jóvenes profesionales que buscan aportar su granito arena en esta lucha constante contra el COVID-19. Esta nueva modalidad permite combatir el crecimiento del virus en los lugares de mayor cantidad de público y exposición sin perjudicar al medio ambiente.
Otro de los equipos a disposición de la comuna sanisidrina, es la aplicación UV-C, la cual permite generar ozono, gas incoloro obtenido por la ionización del aire al exponerlo a la luz ultravioleta, aumentando la eficacia en el proceso de desinfección.
Cabe resaltar en este último, que el método UV-C permite ingresar al ADN del virus, eliminándolo completamente. Mientras que el ozono generado en este proceso, consigue un mayor alcance, cubriendo las zonas donde la luz ultravioleta no llega.
Ambos sistemas son respetuosos con el medio ambiente, debido a que no utilizan ningún producto químico contaminante. Asimismo, no son corrosivos, ya que no dañar las estructuras desinfectadas. Resaltando el ahorro de tiempo y trabajo como una de sus grandes ventajas en su uso.
El alcalde de San Isidro, Augusto Cáceres Viñas, adoptó este innovador proyecto ecológico que usa como insumos el agua y energía eléctrica, sin generar ningún residuo o daño medio ambiental, poniéndolo en marcha en distintos puntos del distrito, reforzando la labor de desinfección que se hace diariamente.